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Guía de Fascination
Guía añadida por Administrador el 2003-10-03
fascination FASCINATION

EN LA HABITACIÓN

Puse en el enchufe -junto al frigorífico- el adaptador de corriente que había en uno de los cajones de la habitación. A continuación me propuse a abrir el maletín, cuya combinación era AARGH. Dentro encontré un cepillo de dientes, seleccioné 220V y lo enchufé al adaptador en la red. Al conectar el cepillo, se abrió el mango y encontré dentro una ampolla. La metí dentro de una de las bandejas para hielo del frigorífico que estaba junto al enchufe y puse el agua de la jarra en la bandeja para ocultar la ampolla. Desenchufé el cepillo, quité el adaptador del enchufe y conecté la nevera a él.

 
EL HALL

Bajé al hall y cogí allí un llavero, que cambié a la recepcionista del hotel por una llave de las
taquillas de los vestuarios. También había una ficha de teléfono sobre el cenicero y una guía
telefónica entre las revistas. Aquí encontré el teléfono de Jeffrey Miller. Lo apunté.

 
REGRESO A LA HABITACIÓN

 Llamé desde la habitación a Jeffrey por teléfono y me dió el código del inmueble, que también apunté. Hechas estas anotaciones, me dirigí hacia la piscina para encontrarme con Rob.

 
PISCINA

Hable con Rob y Prisca -dos compañeros de trabajo- Me guardé una linterna que ella había
encontrado. Pedí un café a la camarera guardándome algún azucarillo. Luego puse el sombrero que estaba colgado en el poste de la barra del bar sobre la cabeza de mi amiga y pulsé el interruptor de los focos de la piscina, que se encontraba debajo. Al encenderse, ví el destello de un "colgante" que aquella había perdido : lo recogí.

 
EN LOS VESTUARIOS

Acto seguido me dirigí hacia las casetas de los vestuarios, que se encontraban detrás de la barra del bar y entré : con la llave que me dio la recepcionista, abrí una taquilla, encontrando dentro un cassette. Con la ficha de teléfono que llevaba encima, abrí el compartimento de las pilas en el cassette e introduje la pila en la linterna.

 
LA CABINA TELEFÓNICA

 Salí de la piscina y me dirigí hasta la cabina más cercana. Introduje la ficha para poder marcar el teléfono de Jeffrey, y él me dio un código confidencial. Tras apuntarlo, salí de la cabina y me dirigí al edificio del Q.U.L. Allí se me pidió un código -introduje el que tenía una letra- y pude subir. Necesitaba coger la llave del conserje, y tuve que apaciguar al perro que me lo impedía, dándole un azucarillo. Cogí las llaves del cuchitril y me las guardé.

 
EN EL PARKING

Bajé al parking y me dirigí al cuchitril para abrirlo con las llaves que cogí arriba. Lo examiné con la linterna y descubrí a la derecha de la puerta un pestillo que me permitió cerrarla. Había una camisa colgada y en su bolsillo unas llaves de coche. Las cogí e intenté meterlas en la puerta del que estaba cerca del mendigo. Como la cerradura no respondía, me acerqué a él y le pregunté por el coche: tendrás que pegarle una patada en la rueda para poder abrirla después con las llaves. Entre los sillones encontré una tarjeta magnética. Introduciéndola en la ranura del codificador del ascensor, marqué el código que me diera Jeffrey y accedí al interior de las instalaciones.

 
EN EL Q.U.L.

 En la habitación de Jeffrey, registré el interior de su chaqueta y encontré un pañuelo de seda que desenvolví sobre la mesa, encontrando en su interior un microcassette. En la librería encontré que uno de los libros "Manual" había un resorte que al pulsarlo descubrió un bar oculto: tirando de la cadenilla encontré un dictáfono. Como funcionaba con energía solar, debí pulsar el pezón de la lámpara para iluminarlo y ponerlo en marcha. Inserté el microcassette y escuché el mensaje.

 
LA BOUTIQUE

Me dirigí a Coconut Grove. Me metí en la tienda y cogí el periódico. Entré seguidamente en cada uno de los probadores, según se iban abriendo. Encontré un zapato y un trozo de papel en el suelo de dos de ellos. A través del otro, podía acceder a una puerta privada, pero como sonaría un mecanismo de campanilla al abrirla, tuve que sujetarlo antes que me delatase. Dentro de la sala, pulsé en el poster que tenía un hombre desnudo con la mano entre las piernas. Al tocar la mano, se enrolló y detrás había una misteriosa llave. Moví todas las cajas del almacén hasta que encontré detrás de una de ellas, una caja fuerte. Su candado lo abrí con la llave, y la barra la descorrí con el zapato. Abrí la puerta ayudándome con la etiqueta adhesiva que estaba pegada en el borde de uno de los estantes de encima. Para abrirla, usando la combinación, debía escribir las letras D.O.C. mientras usaba la rueda entre una y otra.

 
EL QUIRÓFANO.

Tomé prestados de la bata de cirujano una mascarilla y una llave con la cual abrí las puertas del armario. Dentro había un frasco con más ampollas, que rompí con el zapato para sustraerlas. Tomé unas fotos firmadas por Lou que estaban un estante más arriba y robé un escalpelo de la bandeja de instrumental. Me dirigí al contestador, que puse en marcha para oír los mensajes, lo cuales borré más tarde para no dejar pistas a mis enemigos. Regresé al hotel.

 
EL HOTEL

 Tras el mensaje de la recepcionista, subí a mi habitación. Tomé la caja de bombones, un pin del suelo y miré dentro del vaso que había sobre la mesa. Como el comisario me estaba esperando abajo, fui al hall. Respondí a las preguntas que me formuló en éste orden: 2, 2, 1, 2, 1. Luego, cogí del suelo una papeleta y apunté su número. Examiné la pila de periódicos y miré una esquina rasgada donde había otro número. Los junté y llamé a Lou. Me encaminé donde estaba.

 
EL ESTUDIO

Al llegar a su casa encontré un coche que levantó mis sospechas. Quité un billete de diez dólares del parabrisas y ví dentro un pin y una caja de ropa de lencería. Me decidí a entrar por la puerta de servicio y para ello, miré en la papelera para coger el periódico, puse la foto en la ranura de la puerta y metí el escalpelo por la cerradura hasta que hice caer la llave de la puerta, y recogí la foto con la llave para poder encontrarme al poco rato dentro de la cocina de la casa. Cerré el ventanuco que daba al salón y me puse la máscara. Abrí una de las puertas de abajo, cogí un paño y -abriendo el grifo- lo empapé de agua para colgarlo acto seguido en el gancho que se encontraba bajo el ventanuco. Abrí la puerta que se encontraba más a mi izquierda, donde estaba el cubo de basura. Luego, cogí la palangana de otra de las puertas y la puse sobre la encimera. Puse en ella amoníaco, sosa y moví una de las copas del estante de arriba -que cayó al cubo de la basura sin hacer ruido- para coger el cloro que se encontraba detrás de ella. Al mezclar todo esto en la palangana, se produjeron vapores, por lo que rápidamente abrí el ventanuco -dos veces- y puse la palangana al otro lado del ventanuco, para luego cerrarlo y tapar las ranuras con el paño húmedo: despejado el
camino, me enteré de más cosas.

 
EL CLUB

Aunque enseñé el pin, el portero no me dejaba pasar, y tuve que sobornarle con los diez dólares que encontré en el parabrisas del coche. Dentro, dialogué con el falso Kenneth y, respondiendo a sus preguntas 2, 2, 1, 2, 1, conseguí que me llevase a su casa.

 
EL SALÓN

En su casa, conseguí hacerle tomar bombones y se durmió. El tatuaje que tenía en el trasero, le delataba. En su mano encontré un anillo. Pasé al interior de la casa, y tomé la cucharilla del suelo.
Levanté el parche del pirata, encendí la luz del acuario, dí plancton a la ostra para que se abriera y cogí con la cuchara la perla, que deposité en el ojo del pirata. Le di a fumar el puro del loro y un láser salió disparado a la estatua de enfrente. Pulsé el panel que tenía aquella e hice coincidir el anillo con el panel. Una puerta se abrió y me encontré en la sala de operaciones...

 
VILLA VIZCAYA

El comisario me interrogó y respondí a sus preguntas 2, 2, 1, 2, 1, para dirijirme al baño después. Allí, examiné el armario y cogí un bote de espuma. Pulsé la quinta baldosa a la izquierda del toallero -que estaba rota- y descubrí un armario secreto. Cogí de la papelera una jeringuilla, destapé el frasco de formol que contenía los ojos y tomé una muestra con la jeringuilla. Fui hacia el vaporizador del estante superior del armario secreto y lo llené de formol. Así armada, me dirijí hacia el comisario para dejarle frito con el vaporizador.

 
EL SALÓN

 Pasé a una sala llena de cuadros: junto a los gatos había otro periódico: apunta la fecha. Pulsé en el interruptor de uno de los cuadros "El sueño de una desnudez", y apareció una rueda con el horóscopo. Situando el indicador en el signo del zodíaco que era Doc -en el contestador le felicitaban por su cumpleaños dos meses atrás, y supongo que apuntaste la fecha del periódico...